El interés de Paz por capturar imágenes íntimas de personas y grupos en entornos particulares, la llevó a prestar sus servicios como fotógrafa amateur de un bar, en un ambiente de trabajo inseguro debido al acoso que recibió de parte de un jefe con “necesidad de afecto” (como lo delata el audio que Paz grabó a escondidas) y un espacio de revelado de fotografías no sólo precario, sino peligroso. El resultado son una serie de retratos grupales de clientes de un bar al sur de la ciudad frecuentado por “famosos” de la televisión y futbolistas. Las fotografías de Paz dan cuenta de la aspiración de una clase social y del prestigio que les suponía estar rodeados y fotografiarse junto a un pretendido star system mexicano.

En un mundo plagado de imágenes en alta resolución, editadas y mejoradas, las fotografías de la serie bar bar son no sólo resultado de sus condiciones de producción, sino también del interés de la artista por la estética de la fotografía de souvenir y la imagen empobrecida, de baja resolución, encuadres espontáneos y estilo amateur.

Luis Vargas Santiago/Andrea Villers

Ciudad de México

Plata gelatina, impresión digital